viernes, 24 de abril de 2020

Debemos fortalecer la oferta


El coronavirus pegó fuerte. No desde el punto de vista sanitario, donde parece que las cosas están bastante controladas y el Gobierno tomó medidas oportunas y eficaces, sino en el armado social económico de los sectores vulnerables.
Mientras se efectúan anuncios y se hace efectivas algunas medidas, un vasto sector de la población económica se encuentra a merced de una anarquía particular.
El coronavirus muestra con crudeza que las medidas del Gobierno son necesarias, pero no suficientes: el sector de los pequeños comercios está sufriendo una grave disyuntiva basada en la falta de aplicación de los anuncios, por una parte, y por otra, como un agravante, la ausencia de medidas de auxilio y rescate.
La peluquera del barrio se plantea comer o arriesgarse a abrir con cautela, con turnos y evitando la aglomeración. Lo que desde nuestra casa podemos juzgar como un acto hasta irracional, en la realidad efectiva la disquisición es real. Y la necesidad manda.
El Estado está haciendo un esfuerzo descomunal. Pero se encuentra frente a algunas trabas importantes: los bancos siguen cobrando altas tasas (y no me vengan a decir que una tasa del 24% para pagar sueldos a las pymes es barata porque no es cierto), y además ponen trabas para otorgar los préstamos.
El error de cálculo en la población que recibe el Ingreso Familiar de Emergencia nos muestra que el INDEC del macrismo era mucho menos eficiente que lo que suponíamos, porque no se puede tener un error de estimación de un 100% mínimo. Y esto obliga a un recálculo permanente y a una corrección en algunas cuestiones imprescindibles para la toma de decisiones.
Las flexibilizaciones al aislamiento son insuficientes, porque existe una gran porción del Pueblo que queda sin ingresos y confinado. Y en esto el Estado tiene que ser práctico.
El ejemplo de la peluquera lo podemos reproducir en los zapateros, en pequeñas tiendas, en cuentapropistas a demanda y en muchos más rubros. Si a esto le sumamos una falta de control de precios y las actitudes especulativas de los de siempre, estamos frente a una ineficiencia del Estado frente a esta crisis.
Poner dinero en el bolsillo de algunos sectores es insuficiente en el entorno general. Y ponerlo en el de todos los sectores tampoco es suficiente. Si no fortalecemos la oferta, la demanda no va a ser satisfecha. El ministro Kulfas dice que, debido a que existe una gran capacidad ociosa del aparato productivo, en la medida que se vaya levantando la cuarentena se va a ir empezando a fortalecer la demanda.
Es necesario decirle al ministro Kulfas que la economía no es tan lineal. Que la economía positiva se escapa de algunas de las normas establecidas. Que para producir hace falta que existan insumos, que la cadena de pagos debe ser restablecida, que las tarifas deben ser pesificadas y tornarse accesibles y que para que haya oferta, deben sobrevivir los pequeños comercios que la proveen. Que muchos de los insumos para la producción, merced a la destrucción del gobierno macrista, no son de producción nacional y que el dólar paralelo está prácticamente duplicando al dólar oficial, y eso es una complicación grave para la importación. Qué la baja del petróleo a nivel internacional no se refleja en una baja de los combustibles locales, lo que impide una adecuación de la cadena de costos de los productos que eventualmente deben ser producidos.
El parate de las Pymes es importante. Y no basta con subsidiar solamente los sueldos. Porque subsidiando los sueldos mantenemos la demanda, pero no se pueden seguir eternamente porque si no avanzamos con subsidios en tarifas y con tasas bajas de verdad las Pymes no solo no van a aumentar la oferta, sino que van a cerrar.
La situación de los pequeños comerciantes y de las Pymes es delicada. Mucho más delicada de lo que se supone: el diferir los vencimientos hacen que las deudas se acumulen. Y cuando esta pandemia pase, la reactivación va a ser paulatina y no tan rápida como para permitir la devolución de los créditos a corto plazo.
Es necesario un plan económico y no medidas aisladas. Porque esto es una sábana corta. Siempre queda un sector descubierto. Y nosotros, desde nuestra ciencia, no podemos darnos el lujo de improvisar o de poner parches.

jueves, 2 de abril de 2020

Economía y Coronavirus: la puja de poder.


La discusión que se plantea entre economía vs. salud a esta altura de las circunstancias, lo único que esconde es la voluntad del Poder Económico en doblegar al Poder Político y sostener privilegios que en las actuales circunstancias podemos determinar que son hasta criminales.

Frente a los despidos masivo llevados adelante por los más adinerados del país, la política sale a marcar la cancha. Y la respuesta no se hizo esperar: desde las empresas de medios se fogonea que no se puede parar la economía, que es más criminal parar que dejar que el virus se lleve puesto a los más vulnerables.

Los voceros son comunicadores alineados con las empresas y economistas que han llevado adelante las políticas que jamás dieron como resultado una mejor calidad de vida para los Pueblos, favoreciendo la concentración de la riqueza en manos de los que hoy exigen que se dinamice la economía.

Los argumentos que esgrimen estos economistas (algunos mal llamados, porque la economía debe brindar soluciones a los pueblos en general) son risueños, rebatibles y contradictorios.

Esgrimen que el parate de la economía conlleva menor recaudación. ¡¡¡Chocolate por la noticia!!!!! Y que la solución es emitir y que esto trae aparejado una inflación que sería colapsante. Falso argumento: emitir es una potestad que tiene el Estado y esta emisión se ve contrarrestada por la disminución de la actividad económica. Por lo tanto, la inflación alta se neutraliza por el enfriamiento de la economía. Se emite porque no se recauda y porque no tenemos financiamiento externo. Tenemos colapsado el crédito internacional por dos motivos: primero por el desastre económico del Macrismo que nos hizo caer en la más baja confiabilidad a nivel internacional para solicitar un mango. El segundo es porque el contexto internacional también está en crisis. Entonces, hablar de la economía monetaria en el contexto actual con las intenciones de aplicar las políticas de otra realidad es una soberana estupidez.

Agitan el terror diciendo que, de seguir este camino, no se van a poder pagar siquiera las jubilaciones porque el Estado no va a tener dinero. Otro error. Podemos emitir y con esa emisión tratar de reactivar la economía por dos medios: poniendo dinero en el bolsillo del Pueblo y dando créditos blandos para Pymes. Lo que no te cuentan desde el poder económico es que en su plan no va a ser necesaria pagar jubilaciones porque el sector más vulnerable sin el cuidado del Estado es el que lo cobra. En este caso, además de liberales son Malthusianos. Eliminan el déficit matando a los que ellos piensan que lo generan en virtud del bien de la mayoría, que en realidad es la minoría que concentra el dinero.

Para no ser muy extenso, solamente falta ponerle el cascabel al sector financiero: deben hacer su aporte para la generación de bienestar en esta época de crisis. Plantear intereses de financiación de tarjetas de crédito al 49% diciendo que antes estaban al 54% es una burla absoluta. Son el sector que más beneficios obtuvo en los últimos cuatro años. Desde el Estado se deben poner medidas inflexibles para regularizar la situación en esta emergencia. Otorgar préstamos a Pymes para el pago de sueldos al 24% anual también es ilógico. En el actual contexto, el esfuerzo se  debe hacer con tasas al 0% y dos meses de gracia para poder volver a generar actividad productiva. Y esto tiene como asidero que el FMI nos condona parte de la deuda y nos da hasta el 2024 para empezar a pagar.

Frente al embate del Poder Económico para doblegar al Poder Político, la política tiene una oportunidad única acorde a lo que alguna vez dijo Alem “En política se hace lo que se debe. No lo que se puede ni lo que se quiere. Lo que se debe”.  Es hora de hacer lo que debemos.

miércoles, 20 de noviembre de 2019

Sobre la Soberanía y quien tiene el mando. Remixado.


Sobre la soberanía y quien tiene el mando.

“El nacionalismo de ustedes se parece al amor del hijo junto a la tumba del padre; el nuestro, se parece al amor del padre junto a la cuna del hijo (...) Para ustedes la Nación se realizó y fue derogada; para nosotros, todavía sigue naciendo”. Jauretche

Curioso mi país, tu país.
Curiosa la potestad delegada para dirimir problemas en los tribunales de un estado de un país extranjero.
Curiosa la concepción de soberanía de la dirigencia no Peronista.

Estamos en una situación que ya no es novedosa. Así como en alguna vez sorprendimos con las huellas digitales, la transfusión de sangre o el dulce de leche, alguna vez volvimos a sorprender siendo la punta de lanza de la lucha contra las corporaciones financieras internacionales y luego el cipayismo tiro por la borda el avance. Pero no las convicciones que el 10 de diciembre vuelven a Balcarce 50 institucionalmente.

Había una vez un Presidente que heredo una pesada carga generada por otros, y en lugar de solucionarlo, tomo un par de medidas equivocadas. La historia económica y política del país conoció esas medidas con los nombres que le pusieron desde el poder político de entonces: el Blindaje y el Megacanje. Ambos fueron vendidos como la solución a los problemas del país. Por supuesto que ni siquiera pensaron en el Pueblo. Solamente titularon de manera escandalosa la mayor traición al Pueblo desde la economía desde 1983, pero que quedo minimizada frente a la nueva traición llevada adelante desde el 10 de diciembre de 2015.

Pero lo curioso (el término curioso supongo que aparecerá varias veces en este escrito) es que no creo en las malas intenciones de los que lo llevaron adelante. Ellos, a los que vamos a comenzar a llamarlos por su nombre, De La Rúa, Machinea y Cavallo, fueron bienintencionados. No me cabe la menor duda que cuando tomaron las decisiones que provocaron el mayor desastre económico y de violación de la soberanía, pensaban que hacían lo mejor. La pregunta es: lo mejor para quién? O para quienes?

Y ahí es donde debemos pararnos. Y la peligrosidad del discurso de los que  aún hoy piensan como la Alianza, y hoy se llama Cambiemos. Ellos, que vendieron las decisiones y el futuro, curiosamente hoy critican lo hecho desde 2003 y tratan de condicionar lo que se debe hacer a partir del 10 de diciembre, basados en su falso concepto de soberanía, bienestar, pueblo y progreso

De La Rua, Machinea y Cavallo generaron un canje de bonos (debemos decir que esos bonos fueron en su mayoría emitidos en la década liberal infame) poniendo como jurisdicción para dirimir los conflictos en tribunales de un estado de Estados Unidos. Luego sucedió lo mismo: Macri, Prat Gay, Sturzeneger, Sandleris, Caputo y demás generando éste presente del que nos tenemos que hacer cargo. Un País soberano, que fue reconocido como el de más rápida recuperación con independencia económica entre 2003 y 2015, volviendo a negociar con acreedores internacionales. Y poniendo en el tapete una vieja discusión que algunos pensábamos zanjada: la deuda interna o la deuda externa.

Pero completemos la historia.

Es curioso que nuevamente estemos reivindicando la Década Ganada. En 12 años, sin apoyo externo, con un default provocado por un Estado diezmado por quienes permitieron que lo hagan (Jauretche se me viene a la cabeza tantas veces gritando Cipayos! Scalabrini se me sienta en el hombro y me dicta) mi País, tu País generó un círculo virtuoso que hizo que se ponga blanco sobre negro: la distribución es posible, la industrialización es posible, la nacionalización de los recursos es posible, el futuro es posible, demostrando que el derrame solamente es una quimera de dominación.

Y el concepto de soberanía surge. Inevitablemente. Surge con una fuerza inusitada porque la soberanía debe ser Popular, debe estar empoderada en el Pueblo. Debe sentirse en cada una de las acciones que efectuamos. Y eso solamente lo llevamos adelante en pocos momentos de la historia. Yrigoyen, Perón, Illia, Néstor, Cristina. Y Alberto en pocos días.

La Soberanía no es la declamación de Carrió, el discurso vació de Peña, los vaivenes de Bullrich, la tibieza de Binner, la traición de Schiaretti, el discurso demagogo de Pichetto. La Soberanía es generar acciones que construyen la independencia. Porque la dominación tiene aristas variadas: tecnológicas, culturales, educativas, económicas. Y durante 12 años, si algo tuvo este proyecto que volvemos a instalar a partir del 10 de diciembre, es bien en claro lo que es la Soberanía para los Peronistas. Otros sectores tienen otro concepto de Soberanía. Y ahí es donde radica el peligro.

La lucha es desigual: mi País, el tuyo, contra una concentración económica que tiene tiempo. Mientras nosotros debemos ratificar el poder político cada dos años, ellos pueden esperar. Porque nosotros buscamos el bienestar del Pueblo (otra arista de la Soberanía) mientras ellos tienen otras motivaciones. Y en esa lucha desigual me siento tranquilo: nuestra decisión y nuestro Poder es mayor.

Con este tema se discute quien es el que tiene el poder: si la Política o la Economía. Y, mal que le pese a algunos compatriotas, el poder vuelve a pasar por la Política, tal cual lo decidido en la elecciones del 27 de octubre. Porque si la Política se doblega a la Economía, el futuro de todos los pueblos del mundo esta condenado.

"La riqueza en tanto capacidad de acción, poder, independencia, voluntad y aún espíritu, no es riqueza de estas tierras. Es riqueza particular de los capitalistas extranjeros, así como el valor económico, político o social de las cosechas son del propietario y no del peón que las sembró, cuidó y cosechó”. Scalabrini Ortiz.


Gabriel Monzón

lunes, 10 de septiembre de 2018

Nueva Publicación sobre Proteccionismo en el EUJ

El artículo que pongo a continuación, cuyo título en español es "PROTECCIONISMO: ESTA BUENA MALA PALABRA", fue publicado por el European Scientific Journal y, considero humildemente, que tiene mucha vigencia en la actualidad.
Espero lo disfruten

https://eujournal.org/index.php/esj/article/view/10127

viernes, 16 de junio de 2017

Artículo publicado por el European Scientific Journal

El European Scientific Journal es la publicación científica más importante del viejo continente y una de las de mayor prestigio a nivel mundial.
En esa revista científica publicaron un artículo mío, que adjunto en su versión en inglés y luego en su versión en castellano.


http://www.eujournal.org/index.php/esj/article/view/9412


Proteccionismo o Libre Comercio? El dilema de la Integración Regional y la diferencia entre pueblos y paises. Una crítica a Miller y Elwood 



Resumen: 

La integración regional siempre ha sido una zona de disputa dentro de las escuelas económicas. Desde las escuelas clásicas y neoclásicas (en algunos ámbitos se los denomina liberales y neoliberales) se sostiene que solamente en un ámbito de libre comercio se puede establecer la integración. Basado en el artículo de Miller y Elwood, denominado ¿Proteccionismo o Libre Comercio? , donde sientan la postura de la escuela clásica, es que en este trabajo analizo sus argumentos y planteo un revés de sus razones. La Integración Regional necesita, a mi criterio, del proteccionismo económico para poder desarrollarse. Y en este planteo, recurro a algunos dogmas de las escuelas clásicas y neoclásicas para demostrarlo. 

lunes, 30 de mayo de 2016

La evolución de la Economía: como se cae el relato.

Para los que hablan si saber, les paso la evolución de la Economía de los últimos 16 años.
Creció en forma ininterrumpida desde el 2003.
Los que dicen que los últimos 4 años la economía decreció se equivocan. Los números fríos no mienten.
Pero por otro lado, para los que hablan de que existió ESTANFLACIÓN (inflación con recesión), les quiero informar que el último ejemplo en este cuadro de estanflación se dio entre 1999 y 2002. Y se repite el primer semestre del 2016.
Los números de la economía no mienten. Y con esto queda demostrado que tuvimos 12 años de crecimiento ininterrumpido, que hasta el 2003 la situación económica era crítica y de achicamiento y empobrecimiento constante, y que el 10 de diciembre de 2015 se dejó un país de pie.
Evolución anual PIB Argentina
Fecha Var. Anual
2015 2,1%
2014 0,5%
2013 2,9%
2012 0,8%
2011 8,4%
2010 9,5%
2009 0,1%
2008 3,1%
2007 8,0%
2006 8,4%
2005 9,2%
2004 9,0%
2003 8,8%
2002 -10,9%
2001 -4,4%
2000 -0,8%
1999 -3,4%

lunes, 18 de abril de 2016

Comparto la Nota que me hicieron en Cadena Máxima de Salta

Comparto la nota que me hizo para Cadena Máxima de Salta el periodista Diego Comba, sobre los créditos hipotecarios, el dólar futuro y la economía nacional