viernes, 16 de octubre de 2015

17 de Octubre de 2015: La Lealtad al Proyecto

Si existe una fecha que nos identifica y unifica a los peronistas es el 17 de octubre. Porque el 17 de octubre fue una muestra de la capacidad movilizadora del pueblo para rescatar a quien, injustamente, fue apresado por levantar las banderas de la dignidad obrera, del orgullo de los trabajadores, de la esperanza del trabajo.

Fue un 17 de octubre de 1945 cuando el pueblo humilde, el trabajador, aquel que Evita denominara como los descamisados, se movilizara masivamente para exigir al gobierno la liberación del General Perón. Poniendo de manifiesto que la lealtad del pueblo hacia su líder y de éste hacia su pueblo era más que un temor de la oligarquía: era la constitución de una nueva fuerza que con fuerza imbatible cambiaría la vida política de la Argentina.

Y
esta lealtad es la que nos distingue a los peronistas sobre todos los demás sectores de la vida política: un líder que fue leal con el pueblo, que rescató a los trabajadores del ostracismo a la que la oligarquía los sometía y que ese mismo pueblo, manifestándose organizadamente, se movilizó en su conjunto para la liberación. Y esa liberación del líder es mucho más que eso: es la liberación de la dependencia a los que estaba sometido todo el pueblo. Es la liberación del yugo del sometimiento. Porque el peronismo tiene como esencia romper las estructuras de su época. Porque el peronismo es revolucionario o, simplemente, no es peronismo.
 
El 17 de octubre entonces es mucho más que una efeméride en el calendario. El 17 de octubre es, sin lugar a dudas, la bisagra que tiene la historia de la Argentina.  Pasamos de una patria con una sola voz, la de la oligarquía, a una patria plural, donde se alza cada vez con más fuerza, la voz del pueblo trabajador.
 
Y esto que comenzó un 17 de octubre de 1945, hoy, luego de 70 años, sigue vigente y con más fuerza. Desde el 2003 la Argentina recuperó un gobierno netamente peronista: la dignidad de los trabajadores fue nuevamente puesta como pilar fundamental de la recuperación de la Nación, y eso recomenzó el 25 de mayo de 2003 y sigue vigente hasta ahora. Porque no debemos olvidar que la lealtad, esa lealtad que fue expresada como nunca antes un 17 de octubre de 1945 es ratificada desde la Primera Magistratura del país todos los días. Recuperando los salarios de los trabajadores, generando más puestos de trabajo, permitiendo que miles de argentinos y argentinas puedan jubilarse, recuperando las decisiones soberanas de la Nación, proyectando un país a futuro con planes de inversiones y obras que consolidan lo actuado hasta ahora, recuperando los lazos solidarios, aquellos que ese 17 de octubre nos enseñaron. En definitiva, este 17 de octubre, como aquel, es el sustento de una patria justa, libre y soberana. 

Hoy más que nunca tenemos el deber de la Lealtad. Al Proyecto, al Partido, a la Doctrina, a los Compañeros y a la Patria. Porque hoy podemos ver a muchos que se dicen Peronistas pero no lo son. Porque cualquiera se hace Peronista. Lo difícil es morirse Peronista.

Tenemos frente a nosotros un desafío enorme: la continuidad de la Revolución Peronista plasmada en el Proyecto Nacional, Popular y Democrático que comenzara el 25 de mayo de 2003 donde Nestor Kirchner junto con quien es nuestro candidato a Presidente, Daniel Scioli, pusieron en marcha. Algo que muchos hoy, advenedizos del Peronismo critican, olvidando que la Columan Vertebral del Frente para la Victoria es el Peronismo. Y que la fórmula Scioli-Zannini es la que representa ese espacio que asegura los beneficios de la Libertad con Distribución y garantía de Derechos para todo el Pueblo, aún para aquellos que nos critican fuertemente, de adentro y de afuera.

Leo con preocupación en algunos foros que muchos que ponen fotos de Néstor, Cristina o de Dedos en V están llamando a votar en blanco. A esos les digo lo que dijo Perón en su momento:
“No nos vamos a tirar la suerte entre Gitanos… Sabemos que se juegan otros intereses… Muy bien Señores, el que esté con esos intereses, se saca la camiseta Peronista y se va, nosotros por perder un voto no vamos a ponernos tristes”.

La lealtad al Proyecto nos da identidad Peronista. Y para el Peronismo no nos basta un Pueblo en paz. Buscamos además un Pueblo que viva bien. Y hacía ahí nos conducimos asegurando la victoria votando a nuestros candidatos.
 
Porque el peronismo no se aprende ni se proclama. El peronismo se comprende y se siente.